martes, agosto 01, 2006

Herencia de Sangre



Italia, en el término de poco más de un mes fue el epicentro de las noticias más relevantes del ambiente futbolístico. Por un lado, alcanzó la cumbre con su cuarto Campeonato Mundial. Por el otro, un caos en el Calcio derivó en un escándalo de corrupción al nivel de las altas esferas.

Si hay algo para elogiar en los integrantes del plantel del seleccionado italiano, es que se mantuvieron al margen de todo el conflicto, generando un campo de fuerza con la frase “dediquémonos a esto y cuando finalice el Mundial vemos que sucede en el fútbol local” como estandarte. No es fácil rendir al máximo nivel cuando se tiene conciencia de que al volver a casa, posiblemente se sea un “desocupado”.

En la Bota Europea, reinaba la incertidumbre, y su desencadenante habían sido videos que evidenciaban el fraude en la definición de los últimos dos Scudettos que habían quedado en manos de la Juve.

Instantáneamente, y ante la aparición de distintas pruebas, la máxima organización del fútbol italiano, en forma conjunta con la Comisión de Apelación Federal, determinó la revocación de los últimos dos Scudettos obtenidos por la Juventus y el descenso a la segunda división (más la pérdida de gran cantidad de puntos para la próxima temporada); descenso y quita de puntos para la Fiorentina y Lazio; y quita de 44 puntos para el Milan. Además de sanciones varias para un gran número de dirigentes y un árbitro. El Calcio siempre se caracterizó por la violencia en su juego, pero ¡cómo pega esta justicia! Eran necesarias unas “canilleras judiciales”.

A primera vista, todo “primer mundista”, con una sensación de rígida normativa y organización envidiable. En términos legales, todo en apariencia funcionando como debe funcionar.

Sin embargo, y a pocos días del comienzo de la nueva temporada, todo el brillo comienza a decaer. Algunas grietas se comienzan a mostrar. Si nos remitimos a lo legal, muchos quizá no seamos eruditos en el tema de sanciones disciplinaria de este tipo. Pero antes que cualquier ley, en todos los ámbitos de la vida debe primar el sentido común. Y acá, el fútbol más caro del mundo está en deuda. La justicia modificó su fallo de la siguiente manera: se vuelve atrás en la decisión del descenso de Fiorentina y Lazio, con lo cual militarían ambos en la máxima categoría, eso sí, con una quita de puntos que dejaron a Fiore fuera de la Champions y a Lazio de la UEFA. Al Milan se le redujo la quita de puntos. En cuanto a la Juve, se mantiene su descenso y disminuye su quita de puntos. Además pierde sus dos últimos Scudettos. Los dirigentes, en su totalidad, recibieron bajas en sus condenas inhabilitantes.

Hasta acá la formalidad y los temas legales.

A partir de ahora, usaremos el raciocinio, que en mayor o menor medida, tenemos. Dado la celeridad que requiere la organización de tamaños torneos, ¿no debería resolverse en forma más puntual y breve? ¿En base a que pruebas se procedió? ¿Si las sanciones fueron todas “rebajadas”, quiere decir que surgieron nuevos elementos en el proceso? ¿Cuándo se podrá tomar la decisión como “firme”? ¿Se puede seguir apelando?
Mi gran duda recae en saber si no se podría dar sentencia una vez firme la decisión, en lugar de jugar “dar y quitar puntos” sin ton ni son. Tanto los equipos sancionados, como también el resto, deben tomar medidas rápidas. Por ejemplo, hay equipos que, después de estas sanciones, entrarían en copas internacionales y deberían ampliar su plantel para asumir ambos campeonatos. O por ejemplo, El Inter de Milan, que en razón de la sanción a la Juve, sería el nuevo Campeón, no sabe si comenzar a festejar un nuevo título o esperar a un nuevo fallo. Ni hablar de Fiorentina o Lazio, con un plantel desmantelado, dado que sus figuras tuvieron que emigrar a otros clubes. Ahora, ambos equipos (que se quedaron en la prima serie), deben salir a comprar y organizar su plantel en pocos días.

¡¡¡UNA VERGOGNA!!! Dirían por allá.

Hace un tiempo, en Argentina se produjo un hecho muy similar. Si bien acá nunca se sanciona a los denominados “Equipos Grandes”, se había dispuesto la quita de puntos a, entre otros, Nueva Chicago, Los Andes, Argentino de Merlo y Defensores Unidos de Zárate.

Esta determinación se tomó en pleno campeonato, y, por ejemplo en el caso de Chicago, pasó de su lucha en puestos de vanguardia a pelear por no descender. Poco tiempo después, se procedía a devolverle los puntos quitados, produciendo un desorden general.

Uno también se preguntaba, ¿por qué quitarle los puntos cuando aún la sentencia no estaba firme y luego volver atrás, cuando esto ocurría? ¿En que cambió tal situación?

Argentina e Italia. Dos realidades muy distintas.

Osvaldo “Chucho” Mediopelo, hincha argentino por opción, quejoso de profesión, estereotipo por votación popular, dice al respecto: “en los picados del barrio, no pasan estos quilombos, por que nadie tiene un mango, y mucho menos una cámara! Que aprendan esos tifosis!”.

Argentina e Italia. Dos realidades muy distintas.

Miles de kilómetros “geográficos”, miles de kilómetros “organizativos”.

A veces los mismo pecados, a veces los mismos problemas.

A veces la misma VERGOGNA!!


Sergio Simionato

1 Comments:

At 12:04 a. m., Anonymous Anónimo said...

Realmente es una vergüenza esos manejos arbitrarios que solo persiguen intereses que vaya uno a saber...ni el ámbito deportivo se salva de personajes lúgubres, poco confiables, que hacen y deshacen segun intereses quiza privados...MUY BUENA LA NOTA !

MSP

 

Publicar un comentario

<< Home